Poetisa



LA NOBLEZA DEL ALMA ES LA CUALIDAD QUE NOS HACE ÚNICOS.


domingo, 31 de marzo de 2013

Amor inmenso

Quiero que duermas de nuevo conmigo
y que exhales tu cálido aliento sobre mi oído.

miércoles, 27 de marzo de 2013

Adicta a tus besos

Sueño con la composición de tu boca,
tus labios carnosos flirteando con los míos
y la punta de tu lengua asomándose tímida
en el rellano de mi cueva,
que te corresponde con sigilo y agrado,
jugando a memorizar ese jugoso sabor,
siendo insuficiente con un beso.
Más, quiero otro más.
¡Regálame uno último con el que pueda volar!

Mi secreta fortuna

Cuando una sonrisa resbala por tus labios,
recuerdo tu vestido blanco de coco y jazmín
con el que te conocí,
y vuelve a merger en mí la figura joven y errante que un día,
en el tortuoso camino de la vida, perdí.

Reviviendo todos aquellos momentos de felicidad
comprendo, ahora de más que nunca, 
la fortuna que fue hallarte.
Pero sólo deseo que el "Alzheimer" de mi amor, 
provocado por el estrés y el cansancio de nuestros trabajos sin fin,
no me impida cuidarte hoy y siempre
sin agresiones ni humillaciones.     

En la trastienda

Si cuando llegas a casa está en penumbra...
¿Dónde si no quedó dormida la aurora 
que emanaba el amor en tu vida?
Si cada noche es más oscura que la anterior
y las distantes estrellas son tu único techo. 

¿Dónde?  
Si el cobijo de tu familia quedó a miles de kilómetros
y su desprotección te hace yacer de pena
como daga en el pecho, 
desenvocando en la más pura de las amarguras. 

¿Dónde? 
Si un tedioso silencio acompaña y aturde tus pensamientos
anulando cualquier esperanza de prosperidad.
y rechazando cualquier tiempo. 

Al igual que cuando sube la marea, 
la larga espera arrastró consigo las oportunidades 
y la seguridad de alcanzar una vida propia y digna.

Si nadar en contra de las olas 
es una tarea inapreciable y agotadora,
¿qué será de ti?



Amor secreto

Suavemente dejo caer mi mano sobre la tuya
como la brisa que salpica dulces gotas de agua
que acaricia nuestros rostros a orillas del Nilo.

Expuestos a los juicios de mis más allegados padrinos
seguimos proyectándo una sombra de lo divino,
donde confluye la armonía de tu cuerpo y el mío.